Vuelvo.
Como aquel hijo pródigo que tras gastarse los ahorros de su familia en furcias y drogas vuelve a casa esperando un abrazo, así vuelvo yo.
Vuelvo, esperando no haber perdido alguno de mis tres lectores habituales contándome a mi.
Vuelvo ahora que veo que un señor de Bilbao entra a diario y está más de un segundo. Ese señor tiene derecho a leer algo nuevo, algo que pocos le pueden dar. No sé quien eres pero eres bienvenido a mi hogar.
Vuelvo porque sigue entrando algún desarrapado esperando ver alguna novedad siendo que la mayor novedad es que no hay nada.
Pero en el fondo vuelvo porque ahora, sin fútbol, sin dardos, sin blog y con tanto calor, mi vida se había convertido en una auténtica mierda anodina.
Os dejo una señal de lo que nos espera este verano:
¡Qué pechotes!
Y como sabes que el de Bilbao es un señor y no una señorita?
ResponderEliminarSiempre he pensado que eran hombres mis lectores, aunque ahora ya da igual, hace dos días que dejó de entrar.
ResponderEliminarComo siempre llego tarde
Hola! He contactado con un montón de Batanero para ir reconstruyendo el árbol genealógico de nuestro apellido. ¿Te unes?
ResponderEliminarPor cierto, ¿de qué localidad es el letrero de "Callejón del Batanero"? Se de al menos tres localidades en España donde hay un letrero como ese o similar.
ResponderEliminarPuedes contactar conmigo en tonybat@hotmail.com o en la página de Facebook FAMILIA BATANERO. Saludos blogero.
ResponderEliminarsoy de bilbao, soy chica, era mi hermano el que se metía y yo le seguí a fisgar, no estés triste, volveremos
ResponderEliminarSiempre sereis bienvenidos, ahora ya soy feliz
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