REMAR EN ROSALES DEL CANAL

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Gracias a la cantidad ingente de visitas que recibo, la gente me pide que escriba sobre sus problemas y me organiza visitas para que vea sus motivos y explicaciones. Ayer me tocó lidiar con el centro Remar que se va a ubicar en Rosales del Canal.

Con mi característica objetividad me dirigí al barrio para informarme antes de escribir. Una alegre pareja me recibió y me comentó mientras compraban mi favor a base de cervezas su desesperación.

-Mira Javier, este es el barrio con más natalidad de España y sin embargo, en vez de ponernos parques infantiles o ludotecas nos van a colocar a los de Remar.- Me dijeron ellos
-Y decidme, buenos samaritanos, qué se hace en las ludotecas
-Pues no lo sabemos, nunca hemos estado en ninguna, pero nuestros hijos no se merecen vivir sin ludotecas en su barrio
-Pero antes de una ludoteca que nadie sabe para que sirve, ¿no será mejor ayudar a esos pobres toxicómanos?
-No no no. Lo que van a venir aquí no van a ser simples toxicómanos, van a venir POLITOXICÓMANOS. ¿Tú sabes que significa eso? Vamos a tener que ir barriendo jeringuillas del suelo, todas las semanas nos robaran el bolso y habrá gente en las terrazas de los bares pidiendo para sus drogas. No solo eso, no podremos coger transportes públicos porque vendrán ellos también y nuestros hijos verán que no todo es de color de rosa en esta vida.
-¿Pero no es mejor que sepan lo que les pasará si entran en el mundo de las drogas?- Pregunté yo un poco perdido
-Aunque de todos los niños que nazcan este año, todos sabemos que el 70% probará alguna vez las drogas en su vida, el 30% padecerá una dependencia social a las drogas y que el 5% van a ser drogradictos, preferimos que sigan pensando que viven en la calle de la piruleta esquina con la calle mazapán.
-Tengo entendido que en Valdefierro también hay algo de Proyecto Hombre y yo nunca he visto cosas más feas de las que he visto en este barrio antes de que lleguen los de Remar- Les comenté distendidamente
-Pero es que los que vienen aquí son Evangelistas. ¿Te puedes creer eso? Son de esos que cantan en misa con coros, pertenecen a una secta y pocos de los que entran salen cuerdos. No queremos que nuestros hijos crean en un Dios distinto al que queremos que crean. Imagínate, como lo iba a decir en el pueblo que mi hijo  se ha hecho evangelista. ¡Antes prefiero que tenga un amigo negro!

Y es que Rosales no se merece un centro de desintoxicación, se merece mucho más. Un centro de salud, mil parques infantiles, cientos de ludotecas, bibliotecas, una piscina pública y una iglesia católica. Tantas carencias tienen que no se puede ni vivir ahí. Eso sí, dentro de diez años cuando los niños empiecen a necesitar centros de desintoxicación porque llevan más mierda dentro que Amy Winehouse, no se quejen porque tienen el centro lejos. Págenles el taxi.

Yo tampoco quiero a Remar en Rosales, los quiero cerca de mi casa. Por una ludoteca en Rosales podeis ir a firmar al barrio.