¿ES QUE NADIE PIENSA EN LOS NIÑOS?

Se llama Manuel pero en la escuela lo llaman Manolito, es un niño de 8 años, aplicado en sus estudios saliéndose de la media en pintar sin salirse y un poco despistado como cualquier niño de su edad. Ayer era su gran día, iba a ir con su tío Paco a ver un partido de fútbol, a ver a su Real Zaragoza.

En la escuela todos los niños, ansiosos por ser más que sus compañeros y con sed de victoria, son del Barcelona o del Madrid, pero él, junto a un escueto grupo de amigos, defiende al equipo de su ciudad, a su Real Zaragoza. Es objeto de burlas y mofas por parte de sus compañeros, acostumbrados a saborear semana sí, semana también, las mieles del éxito sin saber que la competición está adulterada desde el poder central. Manolito, con gran orgullo, siempre dice en el recreo que él es Brauligol, el mejor delantero de su Real Zaragoza, mientras el resto de sus compañeros quieren ser como el tonto de Cristiano o el pusilánime de Messi.

Pues ayer, Manolito fue al fútbol. Ayer lo vi gritar desforado al ver salir al campo a sus jugadores, Jabalí Paredes, Rumbero Lafita, Sin-AlmaySin-gol, NoMarco Pérez o Brauligol. Llevaba un banderín que agitó sin descanso pese a la temperatura invernal que había. Manolito tenía fe, pero su equipo solo le devolvió el drama a su vida.

A los setenta minutos del segundo tiempo a Manolito se le cayó una lágrima. Mañana, Manolito será Cristiano Ronaldo en el recreo. Mañana se habrá perdido otra generación de zaragocistas.

Mañana será otro día...seguramente peor