El sol calentaba desde el cielo, el aire apenas se movía, yo ya me había despojado del jersey dejando entrever mi atlético cuerpo, eran las 16.30 de la tarde y todo hacía presagiar que iba a ser un gran día. Uno de esos días en los que casualmente llegas a casa a las seis de la tarde sin preocupaciones y con la satisfacción del trabajo bien hecho. Todo iba bien, hasta que...
16.30 Suena el teléfono. Llamada al encargado 2 por parte del encargado 1
Hay una fuga de gas en Gelsa, localidad que dista de Zaragoza 60 kilómetros, y en la cual yo ya me encontraba. Debo ir con urgencia al almacén de Zaragoza a buscar material porque el encargado 1, que está en Zaragoza, no lo encuentra. Sintiéndome sumamente valorado, emprendo viaje Gelsa-Zaragoza.
17.00 Llegada a Zaragoza
El almacén está cerrado y no hay nadie en la oficina. Viaje en balde. Llamo por teléfono al encargado 1 y me dice que ya está en Gelsa. Me dice que le iba a decir al encargado 2 que cogiera llaves pero que le ha colgado y ya no ha insistido. Llamo al encargado 2 para saber cuando llegará a Zaragoza y me dice que por lo menos hasta las 18.30 no llega. Me comunica que debo volver a Gelsa a por las llaves. Me cago en el padre de alguno y parto rumbo Gelsa
17.45 Aproximación a Gelsa
Cuando ya estoy a tan solo 2 kilómetros de Gelsa me cruzo por la carretera al encargado 2 que ya salía dirección Zaragoza. Me comunica que debo dar media vuelta y volver a Zaragoza a buscar el material.
18.30 Llegada a Zaragoza
Una vez abierta la puerta del almacén, empiezo a buscar el material. Tardo dos minutos en localizar todo lo que el encargado 1 no había encontrado en media hora. ¿Cuál es mi secreto? Abrir las cajas para ver lo que hay dentro. A lo que voy a salir rumbo a Gelsa llamada del encargado 1. Me dice que espere, que igual no hace falta el material.
18.40 Llamada de teléfono
Me dice el encargado 1 que si, que vaya a Gelsa con el material. Que es una fuga importante
19.20 Aproximación a Gelsa
Cuando vuelvo a estar a tan solo 2 kilómetros de Gelsa me llama el encargado 1. Que ya no hace falta el material, que al final solo había una fuga en el tapón y que me podía volver a Zaragoza. Mirando al cielo que ya oscurecía, le he mandado recuerdos a su padre, a su madre y a todos sus descendientes. Apago el teléfono, y vuelvo a casa.
20.00 Llegada al hogar.
Resignado, sopesando mi valor laboral dentro de la empresa, me dejo llevar por los instintos más primarios y me siento en el sofá a esperar un nuevo día.
Hacer 300 kilómetros por hacer, 20€
Malgastar 3 horas y media de tu vida, 50€
Saber que tienes un cargo de responsabilidad dentro de la empresa, no tiene precio
JAJAJAJAJAJA
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