SOY ESPAÑOL Y REPUBLICANO

La paciencia del común de los mortales tiene un límite, y ya hemos llegado hasta ahí. No se puede soportar que un país en el siglo XXI siga pagando a una familia por "representar a España". Su majestad, que hace 30 años hizo su último trabajo, es su cabecilla. Tenemos que pagarle a él, a su señora, a sus hijos, que lo que más les gusta es parir, y a sus descendientes.

Resulta que la infantona se junta con un vividor según dicen drogadicto y no puede aguantar su matrimonio. La normal parece que aun aguanta, creo que aun no se ha divorciado. Y nuestro heredero al trono se junta con una malcasada que llevará más cañonazos que Belchite.

Pero para más honra de nuestra familia real, en todos los medios de comunicación nos venden la moto de que son guays, el rey muy campechano y que están muy volcados en actos solidarios ayudando a los pobres. Eso si, ellos no se quitan el sueldo. Nunca nos muestran las manifestaciones en contra, ni los gritos en contra de la familia real. No nos los muestran porque no existen, son grupos radicales antisistema. En España todos queremos al Rey, y para eso nos lavan el cerebro. A mi si me dan un bocadillo también voy a la Plaza de España a agitar una bandera y gritar ¡Vivan los borbones!, así que el resto de España también.

Y todo esto viene porque al leer la revista del heraldo de los domingos he visto que han dedicado páginas y páginas a nuestra monarquía.

Y eso no puede ser.