viernes, 26 de febrero de 2010

CARTAS AL AUTOR

Entre los cientos de cartas y postales que he recibo diariamente, ayer seleccioné una al azar para responderla yo personalmente. Todas son contestadas, pero tengo a varias personas para contestar cartas y dar buena cuenta de vuestros presentes.

La carta en cuestión dice:
¿Qué tal tu tiña, capullo?. ¿Entonces tú no eres el que cuentas en tu página? pues... ¿quién es el desgraciado? Hombre, yo no porque en el pueblo no tengo cine. Me tienes que mandar las direciones de los chat en los que tú te metes como en esa que ligaste con la mujer mayor. No pienses mal porque no me van las maduritas.
Querido lector, la tiña va bien, yo creo que en una semana ya podré volver a salir a la calle. El miércoles, en el nonagésimo cumpleaños de mi abuelo, me dejaron ir a verlo, eso si, separados por una mámpara. Espero pronto poder volver a abrazarlo.

El desgraciado, que desde un primer momento me pidió que guardara su anonimato, está sufriendo los rigores del amor. Es el típico pagafantas en su grado máximo, pero algún día, cuando me sobornes bien, te diré su nombre y entonces te reirás

Respecto a los chats, hace un par de años que dejé ese mundo de vicio y perversión, ahora me van las cosas un poco más limpias aunque como soy un tiñoso esta parte igual no te la crees. Aún así, recuerdo a la perfección esos chats en los que gasté mi juventud.

Yo entraba en el chat de terra, en las salas de Teruel, Huesca, Soria y Logroño. En la sala de Zaragoza dejé de entrar, porque ahí solo había gentuza. También entré una temporada en el chat de Lycos, en la sala de Aragón, buscando una perita en dulce pero allí solo había ciruejos. El chat en el que más tiempo pasé fue en el de Ozú, sala de Aragón. Allí conocí a todo el mundo que tenía que conocer, incluso a la mujer mayor que me nombras, pero hace falta o mucho tiempo o que la mujer sea un poco promiscua para conseguirlo.

Que Dios guarde a Vd. muchos años

Javier

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COMO CRITIQUES TE CAPO. MÁS TARDE O MÁS TEMPRANO SABRÉ QUIEN ERES